El pasado sábado, 26 de enero, el Papa Francisco almorzó en privado en el Seminario Mayor San José con un grupo de diez jóvenes participantes en la JMJ de diferentes nacionalidades, entre ellos el madrileño Miguel Ángel Croche Fontela. 

Este estudiante de Arquitectura Técnica de 24 años es miembro de la parroquia Nuestra Señora de los Apóstoles y colabora con la Delegación de Juventud de la diócesis. «He tenido la experiencia única de poder almorzar con el Papa Francisco y con jóvenes de todo el mundo y he podido comprobar de primera mano su cercanía y humildad y la manera tan directa y especial de decir las cosas», subrayaba al salir del encuentro.

«En esta comida le hemos podido transmitir nuestras inquietudes y nuestras oraciones», agregaba antes de participar en los actos finales de la JMJ, en la que los jóvenes españoles han estado acompañados por el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro.