La voz de Ángela María suena alegre y entusiasta al otro lado del teléfono. Tiene 95 años pero no se ha rendido. Y menos, en cuestiones de fe. Una mujer siempre comprometida, de parroquia, su Santísima Trinidad de Madrid porque ella era del Barrio de la Concepción, que ahora vive en la Residencia Fundación Santa Lucía de Cáritas Diocesana de Madrid. De sus 70 plazas, la mitad son en convenio con la Comunidad de Madrid y la otra mitad son sociales, para familias que no pueden llegar a pagar lo que costaría una residencia al uso.
«Me dijeron que si quería ir a una Misa para la familia en la catedral y yo encantada; para mí es una alegría muy grande, ¡a la catedral y al jubileo nada menos!», exclama. «Aquí tenemos Misa todos los días», explica, y eso a ella le da la vida ella que en su parroquia fue catequista, creo la biblioteca, la filmoteca… «Una vida intensa», reconoce.
De esa época conoce al cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, que será quien presida la Eucaristía jubilar, el sábado 31 de mayo, en la catedral de la Almudena a las 18:00 horas. «Era el vicario de nuestra zona y venía mucho a la parroquia».
Ángela María acudirá al jubileo con un grupo de nueve residentes. El director de la residencia, Manolo Clarós, pone en valor el acompañamiento espiritual que se hace en el centro a cargo de las Hermanas de la Caridad del Cardenal Sancha. «Se ha preparado con mucha ilusión esta Eucaristía jubilar y además a los mayores en general les motiva ver a gente más joven, las familias, los niños». Por eso, este día será especial.