El próximo jueves, 16 de octubre, la Revista Misión celebrará la XIII edición de los Premios Misión, en una gala que distinguirá a ocho personas e instituciones que se han caracterizado por su compromiso con la verdad, la cultura cristiana, la familia y la vida. Entre los galardonados se encuentra la parroquia de san Ramón Nonato, situada en el barrio de Puente de Vallecas, «en pleno cruce de caminos y de culturas». Desde la organización de los premios subrayan que «allí las necesidades del hombre de hoy se palpan, si cabe, con mayor claridad». Bajo la guía de su párroco, José Manuel Horcajo, esta comunidad ha demostrado que la atención a los más necesitados y la evangelización caminan de la mano.
La revista ha querido reconocer a esta parroquia por ser «un ejemplo de cómo ofrecer a las personas no solo el alimento material, sino también el alimento que da vida eterna». Con una labor constante, silenciosa y profundamente evangélica, la parroquia de San Ramón Nonato se ha convertido en un faro de esperanza.
Al conocer la noticia del galardón, el párroco, José Manuel Horcajo, ha querido expresar su alegría y agradecimiento: «Nos da mucha emoción ver que se reconoce la labor de la Iglesia como un espacio donde los mismos pobres, evangelizados por Jesucristo y por la Iglesia, se convierten en verdaderos santos».
?La parroquia de #SanRamónNonato, galardonada con los #PremiosMisión2025 de la @RevistaMision
— Archidiócesis de Madrid (@archimadrid) October 9, 2025
➡️El próximo jueves, la gala reconocerá a 8 personas y entidades que han destacado por su «entrega por la verdad, la cultura cristiana, la familia y la vida»https://t.co/GAYn2reEIr pic.twitter.com/jTzIhVejuE
«Entra un pobre y sale un santo»
El lema de la parroquia resume su carisma y su misión: «Entra un pobre y sale un santo». Desde hace años, cientos de personas se acercan cada día a esta comunidad buscando ayuda, consuelo o simplemente un lugar donde ser acogidos. «Las personas que llaman a las puertas de la Iglesia con muchas heridas y necesidades —explica el párroco—, cuando se abren a los dones que Cristo nos ofrece, se convierten en verdaderos discípulos, apóstoles y misioneros».
El padre Horcajo recuerda con frecuencia las palabras del Papa Francisco, quien invitaba a toda la Iglesia a «evangelizar a los pobres ofreciéndoles los regalos de Dios». Y eso es precisamente lo que ocurre en San Ramón Nonato: «Al ofrecerles la Palabra y los sacramentos, muchos descubren que Dios siempre ha estado con ellos. A menudo nos dicen que lo único que les ha ayudado es Dios. Es emocionante ver la fe profunda que tienen estas personas».
Una comunidad viva que evangeliza desde la pobreza
La parroquia no se limita a asistir a los necesitados, sino que los convierte en protagonistas de la evangelización. «Estos pobres —añade Horcajo— se transforman en los primeros responsables de esa misión. Dan testimonio, imparten catequesis, se ofrecen como voluntarios y sostienen los más de cuarenta proyectos que tenemos en la parroquia».
En San Ramón Nonato, la caridad no es solo un gesto puntual, sino un camino compartido. «Ellos no son solo receptores de ayuda —explica el párroco—, sino verdaderos protagonistas de la caridad y la fraternidad, porque viven todo en comunión». De esta manera, la parroquia se convierte cada día en una escuela de santidad donde se aprende que la fe y el amor se fortalecen cuando se comparten con los más pequeños y los más heridos.
«Jesús ama a los pobres»
El sacerdote quiso también hacer referencia a la primera exhortación apostólica del Papa León XIV, Dilexi Te, dedicada al amor a los pobres, un texto que —según afirma— ha conmovido profundamente a la comunidad parroquial: «Nos ha alegrado mucho, porque refleja lo que vivimos cada día en la parroquia: cómo Jesús quiere a los pobres. Es una alegría inmensa y que te llena de esperanza. En medio de situaciones muy duras, vemos el profundo amor de Cristo hacia ellos y la alegría que Él mismo nos da al compartir la vida con los más necesitados».
Para el padre Horcajo, este premio no es solo un reconocimiento, sino también una llamada a seguir adelante con renovado impulso: «».