La parroquia Santa Genoveva Torres Morales (Miguel Hernández, s/n) de Majadahonda fue erigida canónicamente en 2008. Ese mismo año, un 20 de abril, tomaba posesión como párroco de la misma David Benítez.
Desde entonces, la actividad parroquial –litúrgica, pastoral, social- se ha venido desarrollando en un barracón donde se ha ido construyendo la parroquia-comunidad. Pero sin perder de vista la necesidad de construir un templo.
Hoy, ese deseo es una realidad. La parroquia cuenta con un terreno cedido por el Ayuntamiento de Majadahonda para uso religioso y social. Ubicado en la calle Bodas de Fígaro esquina con Barbero de Sevilla, en sus 6.500 m2 se construirá un complejo parroquial integrado por: un templo, salones parroquiales, dependencias para la atención de Cáritas parroquial y viviendas para los sacerdotes. «Todo ello, con la austeridad propia del tiempo que estamos viviendo», como explica Benítez.
Así, «el templo tendrá un aforo de unas 700 personas, de las cuales 450 podrán estar sentadas. Lo han diseñado los arquitectos Ignacio Capapé y Justo Orgaz, del estudio de arquitectura Trasbordo. Pero las obras aún no han comenzado: estamos pendientes de la licencia. Cuando nos la concedan, tenemos un plazo de 24 meses para terminar el templo. Así que creo que la primera piedra se colocará a finales de primavera, en el mes de junio quizás, si la situación lo permite».
Todo el complejo se edificará en una planta, «excepto los salones parroquiales, que tendrán dos alturas. Y es que en ellos pensamos realizar una intensa actividad social, ya que los adolescentes y jóvenes acuden a la parroquia para estudiar, para refuerzo escolar, y para diferentes actividades dirigidas a ellos».
«El templo será un edificio de arquitectura contemporánea, conservando la simbología de la tradición de la Iglesia, prosigue Benítez. De planta basilical, tendrá tres naves figuradas y un ábside al fondo, en el presbiterio. Además, 12 grandes ventanales recordarán a los apóstoles. Y las tres puertas de la entrada evocarán la Trinidad. También contará con tres lucernarios con forma octogonal: sobre la capilla de la Virgen, el Baptisterio y la capilla del Santísimo».
En el exterior, destacará la torre, por su altura. «Va a ser muy alta: 38 metros. Los mismos que mide la nave del templo de largo». Y un gran parking «que facilite el acceso a los fieles. Es algo fundamental en zonas con gran movilidad en coche, como la nuestra» asegura Benítez.
Queda pendiente el tema de la ornamentación del interior. «No lo hemos decidido todavía», confiesa el párroco. «Todo dependerá de las posibilidades económicas», afirma.
Y es que este gran complejo parroquial se financiará con las aportaciones de los fieles. «Yo siempre insisto en que la parroquia es la casa de todos. Por eso, todos hemos de hacer un gran esfuerzo. Por eso, las suscripciones son fundamentales». Hasta el momento, la campaña de donaciones a favor de la construcción del nuevo templo cuenta con 314 familias que, «con sus aportaciones periódicas, nos están ayudando. Pero hacen falta bastantes más. Es necesario el compromiso de todos para sacar el proyecto adelante, y hacerlo bien», insiste.
Por eso, quien quiera poner sus ladrillos puede hacerlo a través de:
- Suscripción periódica (en este enlace se puede descargar la ficha)
- Transferencia bancaria a la cuenta del Santander cuyo titular es la parroquia: ES06 0049 1668 45 2210184698. Indicando: para la construcción del nuevo templo
- Por Bizum marcando el 00058 en la pestaña donaciones a ong de tu app.
En este enlace se puede ver el vídeo de presentación del proyecto. Y en este link, la memoria simbólica.