El arzobispo emérito de Madrid, cardenal Carlos Osoro, sigue recibiendo homenajes tras el fin de su ministerio episcopal. Esta vez en Santander, su tierra natal, el pasado sábado tuvo lugar una celebración en el Centro Asturiano de la ciudad, promovido por la Asociación Amica y con la presencia especial del padre Ángel, fundador y presidente de la Asociación Mensajeros de la Paz. «En Cantabria he recibido la vida, la fe y la ordenación sacerdotal», recoge El Diario Montañés de palabras del cardenal Osoro.
Además, monseñor José Cobo, actual arzobispo de Madrid, quiso hacerse presente en el acto con un mensaje. En él, el futuro cardenal de Madrid le agradece su «tarea de siembra generosa y paciente», su «amistad compartida» y, finalmente, «cuanto has entregado a esta Iglesia madrileña». El prelado madrileño ha querido valorar también sus más de 25 años de camino episcopal y sus ocho como titular de Madrid «en los que has trabajado y te has desgastado al servicio del Evangelio y has sabido generar gratitud, amigos y has macerado en silencio una buena cosecha». También le ha deseado que disfrute «de los abrazos y de cuanto tu tierra te ofrece«. «Sigue siendo peregrino ,ahora más sosegado y acogiendo una nueva etapa en la que nunca faltarán los amigos y los buenos compañeros de camino», terminaba el mensaje.