El próximo 30 de julio se conmemora el aniversario del Decreto de Prisión General contra los Gitanos, una orden redactada en 1749 por Zenón de Somodevilla y Bengoechea, Marqués de la Ensenada, y Gaspar Vázquez de Tablada, arzobispo de Oviedo, ambos miembros del Consejo de Castilla durante el reinado de Fernando VI. Con este motivo, la Pastoral Gitana de Madrid ha organizado una misa en recuerdo de las víctimas, que tendrá lugar a las 19:00 horas en la parroquia de San Francisco de Paula.
Hace casi tres siglos, miles de familias gitanas fueron injustamente perseguidas, separadas y encarceladas, sufriendo la pérdida de sus bienes, su libertad y, en muchos casos, de la vida misma. Aquel intento de exterminio, que afectó a la gran mayoría del pueblo gitano en España, constituye «uno de los episodios más dolorosos de nuestra historia», recuerda Carlos Chevalier, miembro del equipo de la Pastoral Gitana de Madrid.
Hoy la Iglesia quiere «mirar al pasado con verdad y compasión, orando por el eterno descanso de quienes padecieron y reafirmando nuestro compromiso con la justicia y la dignidad de todos». En esta línea, Carlos Chevalier destaca que esta celebración «nace del corazón del Evangelio, que nos invita a reconocer a cada persona como hija de Dios, a trabajar por la reconciliación y a construir una sociedad donde nadie sea marginado ni olvidado».
La Doctrina Social de la Iglesia nos recuerda que «la memoria es camino de justicia, perdón y esperanza», y que todos estamos llamados a defender los derechos de los más vulnerables, promoviendo la fraternidad y la paz.
Por ello, desde la Pastoral Gitana de Madrid animan a unirse en oración y solidaridad, para que, al recordar a las víctimas del pasado, «renovemos nuestro compromiso cristiano de ser instrumentos de misericordia, justicia y reconciliación en el mundo de hoy». Con esta Eucaristía, desean también que el Señor «nos conceda la gracia de caminar juntos como una sola familia, en el amor y en la esperanza».