El Regnum Christi ha entregado los V Galardones Alter Christus con los que quiere reconocer y poner en valor la entrega y contribución de los sacerdotes a las personas y a la sociedad. «Escuchándoles a ustedes vemos que nuestro corazón se enciende y se cuestiona al ver el trabajo que hacen tantos sacerdotes y que son tan desconocidos», explicaba el padre Carlos Zancajo, L.C., director territorial del Regnum Christi y la legión de Cristo en España, en la conclusión de la entrega de los galardones, e invitaba a todos los presentes a abrir horizontes apostólicos escuchando a estos cuatro sacerdotes.

El acto comenzó con una palabras del director de Alter Christus, el padre Ángel Llorente, L.C., y del Dr. Clemente López, vicerrector de Investigación e innovación de la Universidad Francisco de Vitoria, donde tuvo lugar el acto. Estuvieron presentes entre otras autoridades Avelino Revilla, vicario general de la Archidiócesis de Madrid, en representación del cardenal Carlos Osoro.

En esta V edición, los galardonados han sido José Manuel Horcajo, sacerdote diocesano de Madrid, por la labor que promueve en su parroquia San Ramón Nonato, en Vallecas; Juan José Pérez-Soba, por su labor como académico y docente en temas de pastoral familiar; Gaspar Bustos, por su dedicación a la formación de seminaristas y sacerdotes en la diócesis de Córdoba; y el padre Fernando Alcázar, de la congregación de los esclavos de María y de los pobres, por su dedicación en la pastoral digital dirigiendo redes sociales.

José Manuel Horcajo: Los pobres tienen una familia, la Iglesia de Jesús

Este sacerdote madrileño párroco en San Ramón Nonato, en Vallecas, agradeció el trabajo de los 300 voluntarios que llevan los 40 proyectos que tiene en marcha la parroquia. En su intervención explicó cómo surgió la creación del comedor social gracias al empuje de algunos de ellos y la donación de un colegio. Cuando al principio lo pusieron en marcha, aún de una forma muy tímida, «yo me di cuenta que el comedor no era una locura sino una necesidad real». Los voluntarios se volcaban y la gente salió encantada.

«Entonces vimos que los pobres eran los evangelizadores de los pobres -explica-. Eran ellos los que lo organizaban y ayudaban e invitaban a otros pobres. Los pobres también rezaban y después se dedicaban a ayudar a los demás».

Horcajo también explicó que en la parroquia querían llegar a la evangelización de los pobres: «Algunos te llegan con una necesidad económica para pagar una factura u otra cosa y nosotros nos preguntamos cómo evangelizamos a esta persona: ¿la invitamos hacer rezar el rosario?». Y continúa: «Vimos que la solución vino de la pastoral familiar, uniendo así la actividad social y la actividad espiritual básica: las personas que venían con problemas económicos se les atendía también en el plano familiar y después se llegaba con ellos también al plano espiritual». Con esto, concluyó el párroco: «Hicimos ver a los pobres que tenían una familia y esa familia es la iglesia de Jesús, a la que todos entran por la misma puerta: la puerta de la Iglesia es una sola puerta para todos».

Juan José Pérez-Soba, la familia, lugar de encuentro entre Dios y el hombre

El sacerdote y profesor universitario, Juan José Pérez Soba, tras agradecer el galardón, estuvo explicando la importancia que tenía para el Papa Juan Pablo II la relación entre la familia y el sacerdote: «Cuando el Papa Francisco canonizó a San Juan Pablo II dijo de él que era el Papa de la familia. Creo que es una muy buena síntesis de lo que fue su pontificado», señaló. San Juan Pablo II «nos ha enseñado que la atención a la familia es el punto principal para la vida del sacerdote», y esto es porque «la familia es el lugar donde se muestra Dios a los hombres y donde se le acompaña al hombre», y añadió que en este marco «el sacerdote desarrolla un papel fundamental del que Juan Pablo II fue un ejemplo», mucho antes de ser Papa, cuando aún era un sacerdote en Polonia.

Concluyó afirmando que «la verdadera familia no es la que piensa en estar bien, sino la que ayuda a descubrir la vocación de cada uno».

Gaspar Bustos: En los sacerdotes veo a todo el pueblo

Por problemas de la edad y de salud, Gaspar Bustos no pudo trasladarse a Madrid para recoger el galardón. Carlos Gallardo, otro sacerdote de su diócesis también dedicado a la formación en el seminario, lo recogió en su nombre. En su intervención, Gallardo  comentó una anécdota que suele contar Bustos: «Hay una frase de san Juan de Ávila que don Gaspar ha repetido mucho. Alguien le decía a san Juan: ‘Usted dedica mucho tiempo a los sacerdotes, pero tiene que dedicar más tiempo a la gente de la calle’. A lo que san Juan de Ávila respondió: ‘Yo dedico tiempo a los sacerdotes porque a través de ellos veo al mundo entero’. En esta frase está la vida entera de don Gaspar», explicó.

«Don Gaspar nos ha enseñado siempre que ser sacerdote es amar mucho a Jesucristo. Para nosotros ha sido siempre un referente sacerdotal durante los 45 años que ha estado el seminario». Y concluyo trasladando a los presentes unas palabras que dijo don Gaspar hace unos días: «Yo quiero recibir este galardón porque es para los sacerdotes, y mi vida es para ellos».

Padre Fernando Alcázar: Las redes sociales para mostrar el rostro misericordioso de Dios

En sus palabras, Alcázar animó a todos los presentes a participar en las redes sociales: «Quiero compartir este galardón con todos los sacerdotes y todas las personas que creen que a través de la redes sociales se puede llegar a miles y miles de jóvenes». De hecho, considera que a través de las redes sociales «se puede mostrar el rostro misericordioso de Dios».

También señaló la importancia del momento actual: «La Iglesia tiene que aprender a vivir en el mundo digital y a evangelizar allí». De hecho hizo referencia a la expectativa que hay acerca de lo que el sínodo de los jóvenes señale sobre la evangelización del mundo digital, donde se encuentran tantos jóvenes de todo el mundo.  «Un sacerdote predica y tiene una serie de oyentes, pero yo publico una frase o una foto en Facebook y tengo 4.000 personas que lo han visto. Nunca tenido un público tan grande», explicó señalando la importancia que tiene este campo al que llevar también el Evangelio. «Es una plataforma que Dios nos ha dado para extender el Reino».

Padre Carlos Zancajo, el corazón arde y se cuestiona

Cerró el acto el padre Carlos Zancajo, L.C., director territorial del Regnum Christi y de la Legión de Cristo en España. En sus palabras señaló: «Escuchándoles a ustedes vemos que nuestro corazón se enciende y se cuestiona al ver el trabajo que hacen tantos sacerdotes y que son tan desconocidos». «Me cuestiono -continuó- qué estoy haciendo yo viendo lo que hacen estos cuatro hermanos». El padre Carlos comentó que él, aunque ahora trabaja en una oficina, también ha estado en contacto durante todo su ministerio sacerdotal junto a las personas, y que esperaba que los miembros del Regnum Christi al ver su ejemplo también se pregunten «qué más podemos hacer en la línea de lo que hacen estos cuatro sacerdotes».