Este 1 de octubre, Día Internacional de las Personas Mayores, la Iglesia de Madrid quiere sumarse a esta jornada potenciando una iniciativa aún poco conocida para la que reclama toda la colaboración. Todas las iniciativas son pocas para paliar la soledad no deseada y estar cerca de las personas mayores que sufren el abandono.
Por eso, desde la Comisión Diocesana de la Pastoral con las Personas Mayores, se quiere impulsar el TELÉFONO DE ESCUCHA A PERSONAS MAYORES EN SOLEDAD (696 987 885). Se trata de un servicio que es atendido por un equipo de voluntarios de las comunidades parroquiales que han sido formados, que atienden las llamadas diariamente y que ofrecen a través del teléfono una cálida acogida, una escucha activa donde la persona mayor se siente comprendida, escuchada, apoyada y querida con el fin de paliar su soledad.
Para contribuir a evitar el aislamiento de las personas mayores, desde la Iglesia de Madrid se anima a difundir este servicio «que permitirá acompañar y emprender un camino diferente a muchas personas mayores en soledad».